Vale do Peso es un pueblo de Alentejo…
… Cuyos orígenes se pierden en la memoria del tiempo, con varios registros históricos y leyendas que se asocian a su génesis y evolución.
Con historia y personalidad propia, ubicado en el eje arqueológico Nisa-Crato, aún existen restos megalíticos que dan fe de su asentamiento prehistórico (dolmen de Arrachado, tumbas excavadas en la roca en Tapada das Mós y Couto do Chamiço, ruinas de la Pé- do-Rodo, etc.), además de una presencia romana más que probable.
Ya en la época Moderna, tenemos la Iglesia de Nossa Senhora da Luz, con campanario, parroquia de la Orden de Malta, que fue fundada en fecha desconocida, aunque es cierto que los primeros registros parroquiales conservados datan del siglo XVI. siglo (en 1553, los registros de matrimonios, y un año después los de bautismos). Sufrió trabajos de restauración en el siglo siguiente, y está comprobado históricamente que entre 1615 y 1620, la Iglesia fue levantada por el arquitecto Pedro Nunes Tinoco, y finalmente fue remodelada en el siglo XVIII, dotándola de dignidad y belleza acorde con su papel en unir a las personas y las voluntades.
Durante los veintiocho años de la Guerra de Restauración (de Independencia), las tropas castellanas comandadas por D. José João de Austria, destruyeron la región y existe una teoría muy consistente de que la aldea de Pé-do-Rodo fue una víctima. de la furia de estos ejércitos, habiendo dejado sus hogares, donde no regresaron.
Durante la III invasión francesa, en 1811, las tropas comandadas por el general francés Massena, impedidas por las Linhas de Torres Vedras, de conquistar Lisboa, tuvieron que retirarse, y algunas de ellas acamparon en la ladera frente al cementerio actual.
Pero el Alentejo del que forma parte Vale do Peso, y a pesar de la proximidad de la frontera con España, que desde el principio permitió el desarrollo de una especie de contrabando cosmopolita, era, después de todo, otra zona remota incrustada en un Portugal decrépito y decrépito. muriendo.
La llegada del ferrocarril a finales del siglo XIX fue vista como un símbolo de renovación y desarrollo social y económico.
De hecho, el ramal de Cáceres, construido por la Real Compañía Portuguesa de Ferrocarriles, inició su actividad el 15 de octubre de 1879, habiéndose inaugurado oficialmente el 6 de junio del año siguiente. La estación Vale do Peso fue una de las que sirvió a esta línea, y fue decorada artísticamente con ocho paneles de azulejos de Jorge Colaço, que representan actividades tradicionales de principios del siglo XX. El papel del ferrocarril a Vale do Peso es incuestionable. Permitió una movilidad sorprendente que nos acercó a tierras y personas, nos abrió al mundo exterior y en consecuencia amplió nuestros horizontes, al mismo tiempo que tuvo un impacto económico abrumador, al asegurar el empleo de asalariados precarios, en una nueva actividad. que les permitió nuevas metas en la vida.
Pero por estar a unos 3 kilómetros del pueblo, se movilizaron esfuerzos y deseos para acortar la distancia, y esto se logró en 1951, cuando se inauguró el Apeadeiro o Vale do Peso A, la denominación técnica.
Apelando a la imaginación, podemos imaginar las calles engalanadas y al son de la música de la Banda Filarmónica, hombres, mujeres y niños emocionados en sus “copas” los días festivos. Vestían pantalón de algodón, chaleco del que destacaba la “cadena” del reloj de bolsillo, camisa sin cuello (con cinturilla abotonada), botas y el indispensable sombrero negro. Ellos, con falda plisada en la cintura, floreados (no tan brillantes como hoy) o lisos y una blusa con solapa por fuera de la falda (con elástico en la cintura).
Para cubrirse, mantón pirenaico marrón o gris, en rejilla o tela, con flecos. Completaron el atuendo festivo, zapatos de salto o, para los más humildes, zapatos estilo sandalia (tejidos sobre una suela de goma, cosidos con un punzón), y un pañuelo de merino atado alrededor de la cabeza.
Fue en este Vale do Peso donde D. João da Câmara (muchos lo desconocen, pero su importancia en ese momento justificó la construcción de un busto en Lisboa, entre el Teatro D. Maria II y Rossio), escribió en 1893, una de sus obras más importantes: Os Velhos, donde encarna la figura del “Ingeniero Júlio”, que puede entenderse como su propia dimensión biográfica.
Vale do Peso también vio el nacimiento de figuras ilustres (algunas de las cuales son recordadas por placas evocadoras en algunas casas) pero donde el Prof. Manuel Subtil, escritor, ensayista, educador, quien lideró casi todas las iniciativas que ayudaron a destacar Vale do Peso. Fue el fundador del Nucleus Progresso de Vale do Peso.
En estrecha colaboración con los profesores Cruz Filipe, Faria Artur y Gil Mendonça, publicó obras que quedaron en la memoria colectiva de Vale do Peso, como lleva el nombre de tan ilustre Valpesense, asociado a los libros que ayudaron a generaciones de niños y adultos. aprender, deletrear y escribir la lengua portuguesa es algo que nos deja una profunda impresión, y que aún nos sabemos de memoria:
- Iniciación a la Lectura por el Método Global, para la primera promoción de Educación Primaria Primaria.
- Lecturas para segundo, tercer y cuarto grado, también de la Escuela Primaria.
- Cuadernos de aplicaciones.
- Diccionario de la pequeña escuela.
Y luego, las personas anónimas, hombres y mujeres que se destacaron por su competencia como artesanos y artesanos reconocidos y demandados en todas partes, como herreros, albañiles, yeseros, carpinteros, taladores de corcho, en fin, profesiones sencillas pero de enorme dignidad, prestigio y atemporalidad.
Para concluir, el nombre de Fernando Salgueiro Maia, héroe de la revolución de abril, que cambió el rumbo de la historia nacional, tiene una relación sólida y consistente con Vale do Peso. Si nada más, por parte de sus abuelos paternos (Senhorinha y Ramiro Maia).
Para este texto, fuentes iconográficas (fotos), fuentes impresas (recortes de periódicos), fuentes manuscritas (correspondencia) y alguna bibliografía del Prof. Manuel Subtil y principales colaboradores (Prof. Cruz Filipe, Faria Artur y Gil Mendonça, así como los Drs. Faria de Vasconcelos y Fernando da Costa Cabral). También se consultó el trabajo coordinado por el Prof. Joaquim C. Barrento, Vale do Peso, História e Tradição.