Fuimos contactados por 36 Tapas House en Castelo de Vide, que estaban interesados en adquirir nuestra ginjinha franciscana para su local recién inaugurado.
El día de la entrega, fuimos a Castelo de Vide para conocer a los fundadores de este proyecto, Neli y Jackson, y nos quedamos maravillados con el espacio, el concepto, la amabilidad, la acogida y... la comida. Nada más cruzar la puerta de entrada, uno no se da cuenta de si está en el Alentejo, Lisboa, Oporto o cualquier otra capital europea.
Los fundadores, de origen brasileño, se formaron en cocina contemporánea y han realizado diversos cursos de gastronomía, no sólo en Brasil, sino más recientemente en Europa. Hace unos años decidieron pasar más tiempo en Europa, incluso más tiempo en Portugal, y no tardaron en llegar al Alentejo. Dicen que les apasiona esta región y que, aunque han probado otras partes del país, fue aquí donde se identificaron con la región, la gente y todo el turismo que ofrece Castelo de Vide. Decidieron crear un concepto de casa de tapas, utilizando ingredientes de temporada, crearon algunos platos de autor que son fijos en la carta y pretenden lanzar nuevas delicias cada temporada para que la oferta al cliente sea más completa. Su concepto es sostenible, contemporáneo y muy relajado. Nuestra experiencia, al son de la música jazz, fue muy enriquecedora.
Cada plato contaba una historia y cada sabor se convertía en una inspiración. Un lugar para visitar con amigos, ponerse al día y saborear unas ricas y variadas tapas, acompañadas de un buen vino y, al final de la comida, la ginjinha franciscana.